martes, 15 de enero de 2013

LACTEOTURISMO

II Jornadas del Queso "La Cruz del Pobre"en Pedrajas de San Esteban
De todos es conocido el Enoturismo y lo que lleva tras de sí. Ha sido hasta fechas recientes cuando se ha acuñado "en serio" este término y las empresas se han volcado en rentabilizar empresarialmente el vino, dándolo valor en forma de restaurantes, hoteles, paseos a caballo, arquitectura vanguardista, cosméticos y un sin fin de sectores empresariales. A la cabeza podemos decir que está Rioja, mal que nos pese es la región donde está trabajando más y mejor este sistema. En Cataluña especialmente en la zona del Penedés hay mucho trabajo realizado y aprovechan la cercanía del turista que llega a Barcelona, sin embargo está más enfocado a la empresa, más que al vino en general. Similar a la serie de televisión "Gran Reserva" para que nos entendamos.

El enoturismo en Castilla y León está trabajado. Todavía queda mucho campo por avanzar pero es un sector que se ha subido el tren del desarrollo. Hay Denominaciones de Origen donde se ha trabajado más que en otras. En la provincia de Valladolid, Ribera del Duero es la más avanzada, la que más dinero mueve y más riqueza económica genera. Rueda anda detrás de ello pero se ha subido a la locomotora. Pronto aparecerá un proyecto interesante vinculado al turismo. Cigales, Toro y Tierra de León les está costando arrancar, y eso que Cigales tiene un potencial tremendo.

Complementario a ello, se encuentra el mundo del Queso y la ganadería. Un sector atractivo pero que sólamente se dedica a fabricar queso sin aportar un plus económico a ello. Es un sector complejo donde en su mayoría, la gente carece de formación y son empresarias tradicionales y familiares. En la provincia de Valladolid hay tres empresas que están destacando su espacio empresarial como son Cantagrullas, La Quesería Artesanal de Mucientes y La Cruz del Pobre. Las tres empresas son dignas de visitarlas, además de para conocer sus proyectos, para probar sus quesos. Son de los que enganchan.

Quesos típicos de "Cantagrullas"
En Castilla y León tenemos muy buenos quesos, pero no podemos quedarnos solo en eso. Hay que hacer más, hay que apostar por crear una "cultura del queso" que no tenemos, apostar por diversificar tanto los quesos como el rendimiento económico que genera. En Francia nos ganan por goleada y no creo que sea por número de empresas queseras, sino por una mayor cultura del queso y diversificación del mismo. Desde La Cruz del Pobre, Yayo imparte catas de quesos, muy interesante y muy didáctico. La Quesería de Mucientes ha sido finalista en la categoría de la Empresa Turística 2012 de la Asociación de Alimentos Artesanos de Castilla y León... y después está Cantagrullas, la última en aparecer pero que está revolucionando el sector quesero. Con unos quesos estilo franceses, rompedores y abarcando un público diferente al tradicional, ha irrumpido en el mercado como un ciclón. Aparte de ello, es el que mejor maneja las redes sociales y está consiguiendo rentabilidad y presencia gracias a ello. Precisamente desde un minúsculo pueblo llamado Ramiro está produciendo y trabajando sobre ello.

El periodista Javier Pérez Andrés en la Quesería de Mucientes
Estas empresas deben ser punteras en Castilla y León para potenciar el "lacteoturismo", el mundo del queso debe llegar a más gente, debe darse a conocer, su importante, su cultura, de dónde viene. Hay que enseñar la ganadería, explicar los tipos de ovejas, cómo se ordeñan y cómo se hace el queso. Obtener un precio de ello que complemente a la venta de quesos. Enseñar y dar a probar las cuajadas, requesones, quesos... impartir Catas, organizar eventos gastronómicos (este año será la tercera edición del certamen organizado por La Cruz del Pobre con los hosteleros de Pedrajas de San Esteban)... incluso empezar a plantear hacer un restaurante o un alojamiento turístico. ¿por qué no? Herramientas y materia prima tienen pero hay que empezar a cambiar ese chip. Igual que está el enoturismo debe aparecer el lacteoturismo. Y si el quesero no tiene la capacidad para abarcarlo, que delegue en un profesional, un gerente que lo mueva y que lo desarrolle. Potenciándolo se crearán puestos de trabajo y se enriquecerían los pueblos de Castilla y León, donde se trabaja mucho este sector.

domingo, 13 de enero de 2013

ES NECESARIA MAYOR VINCULACIÓN DEL PATRIMONIO CON EL DESARROLLO LOCAL


La Asociación que presido, Ciudadanos por la Defensa del Patrimonio de Valladolid, reclama una mayor presencia del Patrimonio en las políticas relacionadas con el desarrollo local.

El patrimonio cultural, unido al patrimonio natural y al paisaje humanizado, son tres pilares fundamentales en el medio rural y en su trabajo con el desarrollo local. Sin embargo, en la actualidad, se está trabajando de forma separada perdiendo posibilidades de mejorar la gestión de los enclaves.

El territorio es el punto de encuentro del hombre con su patrimonio. Sin una valoración cultural del territorio que ponga de manifiesto la singularidad de sus recursos y estimule la confianza de la comunidad en sí misma y en su capacidad creativa, es difícil que un lugar despegue en su desarrollo social y económico.

El patrimonio no está sólo constituido por aquellos objetos del pasado que cuentan con un reconocimiento oficial, sino por todo aquello que nos remite a nuestra identidad. Si ya es difícil mantener todo el legado que nos han transmitido las élites, el patrimonio vernáculo o popular, está en claro peligro de extinción, casos como las bodegas, la arquitectura popular o el patrimonio inmaterial.

El desarrollo debe concebirse como un conjunto de actividades que garantizan el bienestar de la sociedad, su educación, la expansión de su cultura, la participación de la población en su propio progreso y la apertura a las demás culturas. El desarrollo debe ser sostenible con la utilización de los recursos y en la distribución social y territorial de sus beneficios económicos, sociales y culturales.

Su uso no puede excluir a la población local de su disfrute y tampoco puede comprometa la posibilidad de las generaciones venideras de satisfacer sus propias necesidades.

El patrimonio es un recurso transversal susceptible de ser transformado en un producto para el consumo cultural. El recurso patrimonio debe ser transformado en un producto educativo, que genera identidad, cohesión comunitaria y participación ciudadana, importante para el desarrollo social y cultural de una población. También debe ser usado como un recurso económico para asentar población, que genere riqueza y empleo.  
El patrimonio, como factor de desarrollo debe defenderse desde diversos aspectos:
- La verdadera amenaza del patrimonio es la falta gestión adecuada.
- El patrimonio debe verse con vista amplia. La iniciativa privada es fundamental para el manteniendo de estos bienes, obteniendo rentabilidad económica de ello.
- El patrimonio debe integrarse en la sociedad. No son las visitas masificadas lo que lo destruye sino la falta de educación patrimonial.

Son necesarias unas políticas de coordinación a todos los niveles, entre las Administraciones Públicas, la iniciativa privada y las asociaciones o colectivos, para unir intereses, realizar una eficaz gestión en los recursos y reducir gastos. Sin que se asuma esta coordinación, se seguirá perdiendo tiempo y derrochando esfuerzos.

El patrimonio abandonado es pasto de su desaparición. A partir de aquí, existen diversas maneras de rentabilizar su uso y conservación, siendo fundamental la colaboración de todos los agentes.

jueves, 10 de enero de 2013

DESARROLLO LOCAL, REDES SOCIALES, TURISMO RURAL

Tenemos una oportunidad de oro. Si juntamos los tres conceptos del título, que aunque suenen distantes y diferentes, pueden y deben llevarse de la mano, son los ingredientes de cara a un futuro interesante en el medio rural. No me vale el socorrido discurso de que no hay dinero, estamos en crisis, etc. Ya nos invaden los medios de comunicación y los dirigentes que nos manipulan con unas visiones sesgadas de la realidad. Vivimos en un momento espléndido para las nuevas ideas, para la creatividad, para la cooperación y para buscar nuestras señas de identidad.

Quizá por mi formación y mi experiencia profesional, pero vincular el desarrollo local con las redes sociales y el turismo rural, es hoy mucho más que ayer, totalmente necesario e imprescindible para el progreso de nuestro medio rural y los empresarios.

El desarrollo local necesita coordinación. Unir intereses, esfuerzos y dedicación entre empresarios, colectivos y administraciones. Si antes no se debía hacer, ahora es menos momento para las inquinas personales, los rencores o las sinrazones existentes. No hay dinero, es cierto (según para qué), pero lo que sí tenemos (y mucho) son ganas, calidad, trabajo y dedicación, pues... ¡Aprovechémoslo!. Me duele especialmente cuando me cuentan que en un pueblo determinado, si una persona triunfa, como es del pueblo de toda la vida, se aprecia menos al de fuera. Y si puede ponerle la zancadilla, mejor. Ese no es el camino. Para ello hay personas que trabajan para minimizarlo o evitarlo, sí, esas personas que se están cargando: los técnicos en desarrollo local. Pero bueno, ese es harina de otro costal.

La segunda pata, son las redes sociales. ¿Conoceis los centros comerciales de las ciudades? Sabemos que si vamos a esos "antros", estarán lugares con las marcas de moda, con las franquicias conocidas y hay éxito asegurado, pero........ en el medio rural. ¿Cómo se puede coordinar o conocer? No se ha dado con la tecla mágica todavía, aunque algunos estamos en ello, pero las redes sociales van a ayudar mucho en ello. Con formación y conocimientos, los empresarios del entorno rural, suben a la red directamente y sin intermediarios sus productos o servicios para darlo a conocer. ¿No pensais que es magnífico? Si en Ramiro hasta hace dos años, no había "ni magú" y ahora hay un empresario que lo está dinamizando de tal forma, que ha conseguido que visite el municipio (que no el pueblo), más personas que en los últimos diez años. Se necesita coordinación y las herramientas necesarias para usarlo. Queda mucho por hacer pero el camino se está abriendo.

La tercera pata es el TURISMO RURAL (sí, con mayúsculas), pero no el que está estancado de alojamiento y escaparate. Es decir, mira qué bonito es el pueblo, mira qué vistas, pero cuando llega el lunes te vas y hasta luego. El turismo rural debe englobar muchas más cosas. Mi peluquero dice que cuando va a los sitios pregunta: ¿Qué hay para ver?¿Qué hay de beber? y ¿Qué hay para comer?. Yo añadiría otra pregunta, ¿Qué podemos hacer?. Se necesitan más cosas que enseñar la iglesia (que todos los pueblos tienen una). Si la tradición en ese pueblo es hacer quesos, pues que el quesero enseñe la quesería, su industria, sus ovejas y pueda vender el queso allí mismo. Si se centralizan en packs, podemos hacer verdaderamente lo que es el turismo rural, a la par que dignificarlo.
Atrás quedaron los tiempos de la boina y el olor a vaca. Hay algo más, y en igualdad de oportunidades, gana lo rural a lo urbano de calle, pese a que las Administraciones no lo terminan de ver tan claro.

Es por ello que es necesario despertar estos pilares, potenciar el desarrollo local, las redes sociales y el turismo rural, para que nos enriquezcamos y creemos una sociedad nacida en estos momentos, verdaderamente de calidad y pujante.